*“Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante”. Eclesiastés 4:9-10*
Beneficios de tener un amigo:
1. Aumentará la recompensa. Dos pueden realmente vivir más barato que una sola persona.
2. Un amigo será de ayuda en los momentos de problemas. Estará ahí para ayudarte.
3. La presencia de otra persona en su vida hace que la derrota sea poco probable. Aunque uno puede ser vencido, dos pueden defenderse a sí mismos.
Jesús oró para que sus seguidores estuvieran unidos, así como él y el Padre eran uno (Juan 17:21). Este tipo de unidad y cooperación en el cuerpo de Cristo une a los creyentes “en perfecta armonía” (Colosenses 3: 12-14), permitiendo que el amor de Dios “se exprese plenamente en nosotros” (1 Juan 4:12). El cuerpo de Cristo es más fuerte y está más protegido a medida que nos cuidamos los unos a los otros a través de la adversidad y celebramos juntos las victorias de la vida. Mientras trabajamos juntos y caminamos juntos en la fuerza de la unidad, logramos más para el reino de Dios (Juan 13:35).
Cuando Salomón dijo: “Mejor son dos que uno”, reconoció que los amigos verdaderos y piadosos son un consuelo en la necesidad, una ayuda en los problemas, un compañero en el trabajo y una guardia protectora contra el peligro.
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Serie Devocional: Amar en grupos pequeños
Personal // I.B.Gracia Paz
Amar a Dios, amar a las personas y transformar al mundo
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*“Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante”. Eclesiastés 4:9-10*
Beneficios de tener un amigo:
1. Aumentará la recompensa. Dos pueden realmente vivir más barato que una sola persona.
2. Un amigo será de ayuda en los momentos de problemas. Estará ahí para ayudarte.
3. La presencia de otra persona en su vida hace que la derrota sea poco probable. Aunque uno puede ser vencido, dos pueden defenderse a sí mismos.
Jesús oró para que sus seguidores estuvieran unidos, así como él y el Padre eran uno (Juan 17:21). Este tipo de unidad y cooperación en el cuerpo de Cristo une a los creyentes “en perfecta armonía” (Colosenses 3: 12-14), permitiendo que el amor de Dios “se exprese plenamente en nosotros” (1 Juan 4:12). El cuerpo de Cristo es más fuerte y está más protegido a medida que nos cuidamos los unos a los otros a través de la adversidad y celebramos juntos las victorias de la vida. Mientras trabajamos juntos y caminamos juntos en la fuerza de la unidad, logramos más para el reino de Dios (Juan 13:35).
Cuando Salomón dijo: “Mejor son dos que uno”, reconoció que los amigos verdaderos y piadosos son un consuelo en la necesidad, una ayuda en los problemas, un compañero en el trabajo y una guardia protectora contra el peligro.
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Personal // I.B.Gracia Paz
Amar a Dios, amar a las personas y transformar al mundo
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